Drama en el que una joven americana inestable mantiene una tormentosa relación con un psicólogo también americano que deriva en un intento de suicidio con píldoras en Viena. Roeg trata de amenizar la trama con su habitual despliegue visual y el uso de la música (Tom Waits, The Who, Billie Holiday, Thelonious Monk) porque, a decir verdad, la historia narrada en flashbacks por momentos se vuelve un poco repetitiva. La enfermiza resolución viola el inconsciente del protagonista (Art Garfunkel), de allí que tenga que vengarse en el epílogo de New York.