Drama en el que una familia debe trasladar en una carreta el ataúd de su madre para enterrarla en Jefferson, Mississippi en la década de 1920. Adaptación de la novela de William Faulkner. Con esta película Franco inicia una serie de adaptaciones literarias de obras que a priori están muy por encima de su talento como director. Pero el solo hecho que él las haga ya tiene cierto valor. El recurso de la pantalla dividida trata de representar a los narradores múltiples de la novela. La fidelidad en cuanto a los hechos es prácticamente total. Con el paso de los minutos los personajes ganan un poco de entidad. Sólo Tim Blake Nelson desentona, más que nada por una cuestión de edad. Es que más allá de la técnica empleada por Faulkner, la novela es cinematográfica. Es inútil tratar de pedirle a Franco un film de la magnitud del libro. La única opción para acercarse al material era la tragicomedia y ese es un terreno que todavía excede las capacidades de Franco.