Comedia en la que un pintor utiliza los sueños de su compañero de departamento para vender un comic mientras conocen a dos vecinas que viven en el piso de arriba en New York. La genialidad de Jerry Lewis cuando es entrevistado en un programa de televisión sobre los efectos negativos de exponerse a los comics desde una temprana edad se lleva todos los aplausos. Los números musicales son esporádicos y solamente funcionales. Sobre el final el estilo visual asume la estética del cartoon con espías, persecuciones y secuencias de acción salidos de la nada.