Comedia romántica sobre un matrimonio de abogados enfrentados por un caso en la que una mujer le disparó a su esposo por infidelidad en New York. La película puede verse como una crítica al pseudo feminismo, en el sentido de que pregona que sólo por el hecho de ser mujeres no hay por qué otorgarle privilegios. Pero termina traicionando este rigor porque la pareja protagonista está interpretada por Spencer Tracy y Katherine Hepburn y tienen que terminar juntos.