Thriller en el que un agente americano persigue a una banda de traficantes de droga por Londres, Lisboa, Roma, Napoli y Atenas. Gilling trata de meterse en el mercado americano con un thriller de clase B que cuenta con un par de rostros conocidos y que intenta de sacar provecho de la fotografía en scope y de las múltiples locaciones. Más allá de que el film mantiene el ritmo de la acción de principio a fin, da la sensación de que la historia no logra establecerse en algún punto para poder continuar por un camino más sorpresivo.