Thriller de ciencia ficción en el que un convicto es enviado a una misión suicida en la que debe rescatar al presidente de los Estados Unidos en una New York sitiada en 1997. Carpenter da su particular visión del futuro (New York utilizada como prisión de delincuentes, los policías y los políticos corruptos) empaquetada de película de acción. El film se sostiene no tanto en la idea del rescate (condenada de antemano) como en el excelente caracterización de los personajes (a partir de pequeños detalles). Lo mejor es la realista ambientación de calles oscuras y una resolución a contracorriente que define al protagonista como un anti héroe.