Policial en el que una madre esconde el cadáver del novio de su hijo homosexual y es chantajeada por un hombre que grabó la muerte en un pueblo de California. Nueva versión de The Reckless Moment (1949). A la pareja de directores americanos no les interesa tanto la historia policial (ver por ejemplo la rapidez con que se resuelve la secuencia en la que la protagonista esconde el cadáver y va a buscar las llaves). Su interés, y allí está lo mejor del film, yace en la descripción de los personajes y en la recreación de silencios en el ambiente familiar. La insistencia de los planos del agua también tiene su importancia.