Policial en el que un excéntrico millonario roba un cuadro de Monet de un museo y se enamora de la detective que lo persigue en New York. Remake de The Thomas Crown Affair (1968). Poco a poco el juego del gato y el ratón deriva en una historia de amor que incluye la seducción, la entrega y los celos, pero sobre todo el sexo (una rareza en el cine americano actual). Rene Russo está excelente en su papel de come hombres. La secuencia del robo combina planificación e incertidumbre en partes iguales. El clímax tiene cierto sentido del humor. La curiosa aparición de Faye Dunaway agrega una nota de psicoanálisis que pone de manifiesto la debilidad de Pierce Brosnan. McTiernan sabe que el paseo por el lujo, la exclusividad y la riqueza tiene sus limitaciones, por lo que el tono nunca pierde cierto grado de liviandad. La película se presenta como un entretenimiento inteligente, una muestra de un cine de Hollywood cada vez más difícil de ver hoy en día.