Policial en el que un estibador de puerto está obsesionado con encontrar al asesino de su hermana en Marseille. Adaptación de una novela de David Goodis. En sintonía con el manierismo de principios de la década de 1980 (Coppola, Carax, Von Trier), Jean-Jacques Beineix recrea la atmósfera del film noir clásico a puro color y surrealismo. Le agrega a la historia un poderoso costado dramático, con un triángulo amoroso imposible. La no resolución del asesinato de alguna manera niega los procedimientos habituales del género.