Comedia dramática en el que un grupo de niños pasa el verano en Thiers entre el campamento, los amigos y la familia. Truffaut hace uso de una sutileza y una delicadeza en el trabajo con los niños poco habitual. El resultado es un film tan simple como bello. La película no duda en tomar por asalto el verosímil fílmico en la mágica secuencia en que un bebé cae desde la ventana de un piso alto y no se hace el menor rasguño.