Historia de amor de dos hermanos que se reúnen por la herencia de sus padres en un pueblo de la región Toscana. Visconti se emparenta con Kubrick en cuanto al tono de fábula moral y al hecho de tratar temas tabú, aunque en este caso le falte un poco de pasión a la historia y a las actuaciones. El film es lo más parecido que ha hecho a un cuento de terror gótico, a partir de una mansión que esconde pasillos y secretos y de una fotografía en blanco y negro repleta de sombras.