Ensayo en que una estudiante revolucionaria queda presa de la ideología burguesa en Italia. Resulta fascinante cómo a partir del estudio, la facultad, la comida, la familia, la ropa y la sociedad se autoanaliza la condición revolucionaria de la protagonista y del propio film. Con la abstracción de los planos detalle y la negación de los personajes que hablan de espaldas a la cámara, Godard demuestra una lucidez ajena a toda bandera política.