Historia de amor en el que un joven recién llegado al cielo se enamora de una chica que todavía no ha reencarnado en la Tierra. El tono es tan idílico y tan celestial que uno no deja de imaginar perversiones a ese orden perfecto. Pero cuando lo bello deja paso a lo previsible (el encuentro en la Tierra) y lo insultante (todos pueden triunfar en América), ya no hay diseño de producción o fotografía preciosista que valgan la pena.