Biopic sobre la infancia de Jacques Demy en Nantes en la década de 1940. Agnès Varda recurre a alternancias entre la fotografía en blanco y negro y en color, a fragmentos de los films de Demy y al propio Demy como narrador en off para realizar un acto de amor hacia su esposo próximo a la muerte. La película logra capturar la atmósfera de la segunda guerra mundial desde la distancia y la pasión por el cine de su personaje que ya a esa edad manejaba la cámara y filmaba cortometrajes.