Drama en el que un corredor de rodeo regresa a su pueblo de Arizona para una competencia. Peckinpah hace un western contemporáneo a la manera de Nicholas Ray en The Lusty Men (1952). Hace un gran retrato de personajes a partir de la familia del protagonista, cada integrante en una situación diferente. Las escenas de rodeo quedan en un segundo plano y sólo cumplen un papel funcional. La imagen de estos nuevos vaqueros que recorren las carreteras en autos y tráileres diseñados para sus caballos da un testimonio del paso del tiempo. La escena en el bar casi llegando al final resulta brillante.