Melodrama en el que una cantante de cabaret tiene una canción que la lanza a la fama durante la Alemania nazi en la década de 1930. Inspirado en un caso real. Fassbinder es capaz de combinar el drama del nazismo, una historia de amor y toques de espionaje, a la par de un virtuosismo y refinamiento visual y una lúcida reflexión sobre la relación de la política y el arte. Tampoco descuida la mirada irónica hacia el cine, la historia y los personajes. El pianista en un momento dice: “Soy un músico mediocre, tú no sabes cantar y todos nos adoran”.