Comedia en la que un abogado se involucra en la industria del cine en California en la década de 1910. Bogdanovich hace un homenaje a los comienzos del cine, a la inocencia narrativa y al slapstick, pero sostiene una mirada crítica hacia los abusos de las futuras majors. No es casual que este film lo haya realizado en 1976, un momento en el que cine vuelve a ser un espectáculo de feria y ahora más que nunca queda a merced de las majors.