Drama de acción en el que un padre divorciado vuelve a su pueblo de Arkansas para tratar de evitar que una compañía minera se apodere de sus tierras. La sutiliza de Demme para insertar detalles sobre el pasado del protagonista (que nunca es mencionado), sobre la relación con su novia del pueblo, en los atardeceres y amaneceres que componen la fotografía y en la utilización de la música y el montaje lo hacen capaz de hacer un film bello, emotivo y realista sobre la base de un típico planteo exploitation de violencia y revancha.