Comedia negra atrevida e inteligencia que narra la historia de amor de un joven de 20 años deprimido y una anciana de 80 años energética en San Francisco. Se destaca el estilo visual de Ashby con reminiscencias de Kubrick y las canciones de Cat Stevens, en especial la primera, Don’t Be Shy, durante una genial escena de un fallido intento de suicidio. Las influencias de la película se expanden hasta el cine de Wes Anderson, en especial Rushmore (1998), y la manera de conocerse de la pareja en Fight Club (1999).