Aventura en la que unos niños karatecas deben rescatar a una chica secuestrada en un campamento en California. La película es demasiado oscura y violenta para ser un film infantil y demasiado naif y ligera para ser un thriller. En consecuencia Hanson se queda en el grado cero de la estilización. Al menos la simpleza de la historia y el sentido del humor inofensivo invitan a una leve y lejana simpatía.