Comedia dramática en la que dos hombres buscan chicas un sábado a la noche en Paris. Jean-Pierre Mocky utiliza los constantes movimientos de personajes y cámara para establecer sus filiaciones y sus distancias con la nouvelle vague. A fin de cuentas el film se termina encerrando en la búsqueda del amor siempre esquivo pero posible y en una fiesta decadente que poco tiene que ver con el resto de la película.