Comedia dramática en la que una secretaria sospecha que su vida está siendo filmada en New York. El descubrimiento de una mujer de la independencia del gesto muestra el genio cómico de Paul Bartel capaz de reconocer la mirada, la ignorancia y la indiferencia del otro todo al mismo tiempo. En apenas treinta minutos de duración la velocidad de los diálogos y el montaje no necesita sincronización exacta porque la percepción está desplazada.