Drama en el que un periodista finge para entrar a un manicomio, resolver un asesinato interrogando a uno de los pacientes y ganar el premio Pulitzer. Fuller hace un atractivo acercamiento al tema de la locura. Acierta en el retrato de los variopintos pacientes y la progresiva transformación del protagonista, pero termina siendo demasiado complaciente (resuelve el misterio) y previsible (el protagonista se vuelve loco en serio).