Comedia dramática en la que una chica quiere ser actriz y visita al padre que la abandonó en Los Angeles. Adaptación de la pieza de Neil Simon (1980). Ross y Simon apuestan por un proyecto más pequeño, dan espacio y tiempo a los actores para que encuentren sus personajes, no fuerzan los diálogos ingeniosos ni la dosificación de la información, explican poco, y dejan aparecer la emoción con naturalidad. Logran desviar el planteo inicial del film a un terreno más íntimo.