Thriller en el que una joven profesora de agricultura empieza a ser acosada por un asesino serial de mujeres en Dublin. Adaptación de la novela de Patrick McGinley. Hardy vuelve a la dirección después de 13 años para renovar la genialidad de la corrección british en el género de terror. El color irlandés de los pubs no puede estar ausente del retrato cuando la protagonista empieza a disfrutar de cierta libertad al rígido código moral y religioso en que fue criada. El asesino se inspira en el cuadro de François Boucher de Marie-Louise O’Murphy (1752). El primer asesinato se muestra en paralelo con una cena en el campo y el segundo ni siquiera se muestra… No hay un solo personaje que pueda recibir la denominación de fantasista. Tal vez la película transite un camino demasiado correcto y le falte la intensidad visual de un giallo, pero tiene suficiente desenvolvimiento para llegar a un clímax de deliberado tono erótico.