Drama en el que un niño pierde a su madre en Torino en 1969 y se convierte en periodista en la década de 1990. Adaptación de la novela autobiográfica del periodista Massimo Gramellini. En la primera parte de la película Bellocchio mira de frente al drama y no hace concesiones. Este primer segmento resulta ejemplar de su cine filoso. Bellocchio va directo al núcleo dramático de las escenas y muestra la determinación del niño para enfrentar la pérdida. Pero cuando el film empieza a alternar las escenas de niño con las escenas de adulto pierde todo su poder. La historia en el “presente” (la década de 1990) sufre mucho en la comparación porque resulta muy ilustrativa y esquemática: el pasaje en la guerra de Sarajevo, los ataques de pánico, la historia de amor con una doctora. Sin conocer si el libro en que se basa la película tiene la misma estructura, los adaptadores de la novela (Valia Santella, Edoardo Albinati, el propio Bellocchio) seguramente decidieron alternar las dos temporalidades para que no se note los bajones de ritmo. Pero el problema es que así, la película no termina de levantar en ningún momento. El film queda preso de la tardía revelación de los motivos de la muerte de la madre. Bellocchio continúa su ritmo seguro y constante de producción en la década de 2010, aunque en este caso el film queda a mitad de camino.