Comedia dramática en la que un estafador se hace con las cartas de amor de una mujer que está a punto de casarse en Buenos Aires. El tono de la película es extraño. Por momentos parece una comedia romántica, hasta tiene un toque policial, los personajes esconden mucho y son presentados de la forma más desagradable posible, pero Amadori siempre busca el melodrama de fondo.