Drama en el que un colegio católico aloja secretamente a un chico judío en la Francia ocupada por los nazis en 1943. Las características autobiográficas del relato se notan no sólo en la plausibilidad, sino especialmente en el realismo de la situación. Es una lástima que Malle no haya ido más allá de la exposición de los hechos para darles otra lectura. La resolución es tan previsible como inapelable.