Comedia en la que un vagabundo toma un trabajo en un circo y se convierte en la atracción principal en Estados Unidos. Chaplin lleva a la perfección la construcción del gag visual (la utilización de la casa de espejos, el muñeco del arca de Noé, la escena con el león en la jaula, el equilibrismo en la cuerda floja), aunque se le escapen algunos apuntes manipuladores y algunas contracciones al guión.