Aventura en la que dos náufragos van a parar a una isla habitada por una tribu de mujeres en el océano Pacífico. Corman hace uno de sus films más ligeros de trama (una simple historia de amor) y más bellos visualmente (el rodaje en las playas de Hawai). Tampoco descuida el sentido del humor: los dos protagonistas masculinos forzados a vestir coloridas minifaldas toda la película.