Film de gangsters en el que un ladrón de bancos secuestra a la hija de un empresario en Oklahoma en la década de 1930. Basado en un caso real. Pese a mantenerse en el estricto bajo presupuesto, Roger Corman da un salto cualitativo en su obra a partir de una atípica incursión en el cine de mafiosos. El film no teme despegarse de los tics habituales del género: la mayor parte de la acción transcurre a puertas cerradas, hace un retrato de un personaje cargado de dudas e inseguridades, la mujer es la que tira las cuerdas, invierte la resolución.