Cuento de terror en el que un artista de comic investiga el tráfico de enfermos que realiza una misteriosa ambulancia en las calles de New York. El film está más cerca del thriller que del terror, aunque el planteo indefectiblemente recuerda al giallo italiano y en sus fugaces apariciones el vehículo va ganando una entidad terrorífica. Sin perder el suspenso, por momentos se decanta por la irreverencia: el protagonista es confundido por un asesino de otra trama en medio de una persecución.