Historia de amor de un barrendero y una chica maltratada por su hermana en Paris durante la primera guerra mundial. Borzage encuentra soluciones visuales que expresan la dimensión corporal, emocional y espiritual de la historia: el travelling subiendo las escaleras, los personajes desvistiéndose, las miradas hacia arriba, el caminar por la tarima. De hecho, la primera hora de la película está cerca de la perfección y desmiente la teoría de que un director americano no puede hacer un film de amor. Pero después, con el episodio de la guerra, la película decae.