Grité una noche (2005)

Slasher en el que un grupo de compañeras de colegio son acosadas por un asesino a lo largo de una noche en La Plata. Las referencias al giallo italiano se dejan ver en la apariencia del asesino siempre vestido de negro y en los tres violentos asesinatos acompañados por una música a tope. El balbuceante estilo visual de Bogliano a veces se pierde en la incoherencia y la arbitrariedad de los sucesos (como todo buen giallo). Las jóvenes actrices del reparto son, lucen y suenan como adolescentes. Se brindan en cuerpo y alma a sus papeles. A la película puede que le sobren unos 20 minutos por la presencia de demasiados personajes (por momentos parece más un film de Larry Clark que un thriller con asesino al acecho), pero es un efecto buscado. Luego del suceso de Habitaciones para turistas (2004), García Bogliano sigue siendo la gran esperanza del cine de terror argentino.