Cuento de terror y ciencia ficción en el que una nave espacial mercante recibe un pedido de auxilio de una luna en el año 2122. A partir de una sólida base de ciencia ficción y de terror, el film agrega una dinámica policial que crea un suspenso simple y directo. La banda sonora de Jerry Goldsmith hace un excelente uso de los latidos del corazón. El ritmo parsimonioso incrementa la tensión. La puesta en escena saca provecho de los decorados y la ambientación para potenciar el aislamiento. La nave es un personaje más. El alien tiene su origen en un parásito adherido a la cara. Hay cierta concepción híbrida absolutamente monstruosa una vez que aparece entero. El clímax tiene una inusitada carga sexual.